viernes, 28 de junio de 2013

2017

Mi nombre es Jennifer Acevedo y vivo en un lugar donde mostrarse como uno quiere, no es lo correcto, o al menos, eso es lo que nos hacen creer.
Es el año 2017 y Argentina afronta hace tres años, el séptimo golpe militar, un golpe del cual no es capaz de salir.
Vivo en una Argentina, donde debo callar mis sentimientos, una Argentina que era igualitaria, pero parece que hablar de ello es totalmente historia antigua. He aquí el motivo por el cual escribo esta carta.
La taza de robos hace tres años atrás había aumentado demasiado, el gobierno asignaba planes para todas las personas que no trabajaban, pero parece que eso no alcanzaba para aquellas personas, tres años después, acá tienen las consecuencias.
Un grupo de altos militares de la República Argentina, llego a la casa de gobierno y a las pocas horas después, se oían en todas partes, las palabras del señor Jorge Agustín Sánchez en una cadena nacional que nuevamente la Argentina, no debe olvidar: “A partir del día de la fecha, el gobierno estará en manos de la junta militar, solo es un proceso para organizar mejor al país”, mentiras.
No te voy a decir que los robos no se reducieron, pero el nuevo gobierno no solo buscaba parar la ola de crímenes que invadía a esa antigua Argentina. Las cosas dieron un rotundo giro que hizo que todo cambie nuevamente.
La Argentina estaba sangrando una vez más. Una nueva dictadura estaba en marcha.
Estaba prohibido pensar, expresarse, estar en las calles, estar a favor de “X” partido, o “X” ideas, es que directamente, no podías estar aferrado a ninguna de las ideas que se te pasaban por la cabeza, por que si lo hacías te paraban y te llevaban a quien sabe donde.
Otra vez los secuestros. Igual, fíjate vos que eso había cambiado eh, en el golpe de 1976 te llevaban en los famosos falcon’s verdes, ahora te llevaban en autos celestes. ¡Un lindo color el celeste!
Y con respecto al lugar a donde te llevaban, es imposible de saberlo, ¡Pero si Argentina es el país donde las personas desaparecen así no más!, ¡Es como si se los llevaran los extraterrestres!
Juliana era mi prometida, íbamos a casarnos, pero cuando el Sargento Sánchez y su grupo de militares tomo el poder, el termino “Igualitario” dejo de existir, según él, era antinatural la relación entre personas del mismo sexo, y fue así como en el segundo año de su mandato, no solo se torturaba a las personas que robaban o mataban, si no que también se lo hacían a las personas que estaban enamoradas.
Y fue así también, como se llevaron a Juliana de mi lado.
Juliana salio a hacer unas compras y fue una vecina de otra cuadra que me dijo que vaya a su casa un par de días, por que habían secuestrado a Juli y seguro iban a ir a casa a buscarme. Fui a lo de Florencia, y acá estoy, un mes después escribiendo esto.
Hace un mes exactamente vivo extrañando a Juliana, preguntándome cada noche, hacia donde se la llevaron, o donde tiraron su cuerpo si es que la mataron, y es en esos momentos, cuando recuerdo todo lo que pasamos juntas, nuestros besos, nuestras miradas, y nuestra futura boda, que quizás, nunca se vaya a realizar, y suelo llorar y mojarme mis ojos pensando en ella.
Suelen caerme un par de lágrimas también, por la Argentina, y la señora democracia que todavía no aparece, pero lamentablemente, esta fue también secuestrada por esos señores de uniformes y alto poder que ahora están en el gobierno.
Y sin dudas, también mis lágrimas van por el igualitarismo, que no solo fue secuestrado, si no que también esta siendo asesinado, en cada muerte o desaparición de cada persona homosexual.
Vivo en una Argentina, en donde los gustos dejaron de respetarse, y el amor importa muy poco.
Vivo en una Argentina, hasta en donde amar esta dictado, una Argentina donde amar, es antinatural…



viernes, 14 de junio de 2013

Smile.jpg

Antes de suicidarme, voy a intentar plasmar como fue que llegue al límite de tomar una decisión tan importante y valiente como lo es el suicidio, no tengo el valor suficiente para hacerlo, pero lamentablemente es mi única salida para toda esta locura.
Todo empezó hace un mes atrás, cuando leí un pequeño texto en la web que, desde un principio, me intereso. El texto hablaba sobre una imagen que se encontraba rondando por Internet hace bastante tiempo, pero yo nunca supe de ella. Basta con solo buscar en cualquier buscador ‘Smile.jpg’ y aparecerán varios resultados sobre lo que les estoy hablando.
Cada relato que leí, en ninguno se encontraba la imagen. ¿Era tan aterradora?, ¿Tantas cosas podía desatar una imagen con solo mirarla? Al no encontrarla, aunque la intriga de saber que esa foto me estuviera matando, el tema dejo de preocuparme, hasta olvidarlo por completo.
Llegue a casa, ese miércoles 12 de Junio de 2013, luego del trabajo, y me senté en la computadora para chequear mi Gmail. Un año después de haber dejado en el olvido el tema de la foto, me había llegado un mail de alguien que no conozco, y seguramente no conoceré jamás. El mail estaba escrito en ingles, se ve que la persona era de otra parte del mundo. En un principio pensé que no era más que una broma pesada que alguno de mis conocidos me estaría jugando, pero me interesaba mucho saber que era el archivo que estaba adjunto al mail, ¿Seria esa la imagen que tanto busque y no encontré?, ¿Esa es la imagen tan aterradora?
El mail, según pude entender, decía algo como:
¡Hola!, vi que en varios foros estuviste preguntando por la imagen de ‘Smile.dog’, aquí te la dejo adjunta.
Gracias a Dios apareciste, no sabia a quien enviárselaJ Espero que tengas suerte.” La curiosidad pudo conmigo.
Abrí la imagen.
Ocupo absolutamente toda mi pantalla, ¡El maldito perro ocupo toda mi pantalla!, de esto trataba la maldita foto, de un perro sonriendo, una imagen que no se veía del todo bien, pero que al mirarla lograba hacerte sentir extraño, como si alguien te estuviera viendo realmente.
A penas se abrió y ocupo toda mi pantalla, la imagen que aterraba a tantas personas en la web, a mi me daba un poco de risa, pero no paraba de pensar en lo que escribió el desconocido al final del mail: “Gracias a Dios apareciste, no sabia a quien enviársela”, luego pude darme cuenta a que se refería.
Los días siguientes cuando no tenia nada en que pensar, la imagen se me venia a la cabeza, como si ella quisiera que la pensara, sola, así no más aparecía aquel perro sonriendo en mi cabeza.
A mitad de mes, tuve la primera pesadilla, el comienzo de lo que seria una seria de horribles sueños que me darían ganas de no dormir más. El perro aparecía en mis sueños, ahí estaba otra vez, no le alcanzaba con aparecerse la mayor parte del tiempo en mi cabeza, en mis sueños estaba otra vez, pero ahora para decirme que pase la imagen a alguien más, fue ahí cuando entendí lo que escribió aquel chico.
¿A quien?, ¿A quien podía mandarle la foto de ‘Smile.dog’? Los foros de Internet habían cerrado los temas relacionados con la imagen, los mails no la recibían más, nadie quería saber nada de ella. En un momento pensé en grabarla en un cd, pedir una película en el videoclub y cambiar los discos, así quien alquilara esa película, miraría la imagen y listo, el fin de mis problemas, pero no, no pude, no podía condenar a una persona más a que viva este calvario.
Había grabado el cd, eso es cierto, la imagen se encontraba allí. Pero no me atreví a hacer lo que había planeado, sin dudas, no podía.
Hoy es 12 de Julio y se cumple un mes desde que vi la imagen de Smile.Dog, hoy es el día en el que voy a poner fin a todo esto, por que por más que halla borrado la foto de mi computadora, y haya quemado el cd, el perro sigue en mi cabeza, en mis sueños y en cualquier lugar que mire, el esta ahí, llevándome cada vez más hacia la locura, sonriendo, ahí esta…